En el marco del Congreso Internacional de Mastología, el especialista italiano indicó que hay otras opciones para tratar a un tumor sin que se remueva la mama mediante una cirugía. En Argentina este cáncer tiene una incidencia de 21.500 nuevos casos por año
El cáncer de mama es el tumor maligno de mayor incidencia en mujeres. En Argentina se estima que puede afectar a 1 de cada 8 mujeres, lo que representa una incidencia de aproximadamente 21.500 nuevos casos de cáncer de mama por año.
Frente a este panorama, expertos argentinos e internacionales se reunieron esta semana en el XIV Congreso Argentino e Internacional de Mastología, que se desarrolló en Buenos para compartir avances, tratamientos y estadísticas en busca de mejores herramientas para combatirlo.
En ese marco, organizado por la Sociedad Argentina de Mastología, Infobae entrevistó al doctor Nicola Rocco, especialista en Italia en cáncer de mama.
"Además de mi trabajo en el hospital, también intervengo en una plataforma de salud comunitaria con otros expertos en cáncer de mama a nivel internacional, que buscan permanentemente nuevos elementos de evidencia de enfermedades para obtener el mejor tratamiento para cada paciente", indicó Rocco, que aclaró que hoy tenemos que individualizar a cada paciente y estudiar su perfil genético y de enfermedad para llegar a un diagnóstico preciso.
Para ello, "es importante tener una visión realista y crítica de los nuevos estudios médicos. Hoy sabemos que una mujer cada 8 va a desarrollar un cáncer de mama. Pero es clave destacar que un diagnóstico temprano de la enfermedad permite su curación en todos los casos", resaltó el experto, que resaltó la importancia de la realización de estudios anuales de mamografía y ecografía desde los 40 años. También es recomendable realizarse los controles utilizando resonancia magnética.
"Además, cuando hay casos en la familia es recomendable realizarse estudios genéticos para detectar si se porta un gen específico y determinar sus mutaciones", agregó.
La mastectomía y otras opciones
Consultado sobre cómo actúa una mujer frente al diagnóstico de un cáncer de mama, Rocco indicó que muchas de ellas prefieren la mastectomía como solución radical, que le asegura la curación del cáncer aproximadamente en un 95%, frente a los tratamientos neoadyuvantes.
"Por eso, es muy importante el mensaje que le brinda el médico especialista, que le debe indicar que si el tratamiento primario responde, no es necesario someterse a una mastectomía", precisó y aclaró que "la comunicación clara con el paciente es muy importante. Es clave para la curación del cáncer. El seguimiento de cómo crece un cáncer hoy se realiza en vivo y con una periodicidad muy grande. Por eso no hay que remitirse a la solución final de la mastectomía, cuando el cáncer puede desaparecer mediante otras técnicas oncológicas".
El especialista resaltó que se le aclara a la mujer que una mastectomía no es una operación profiláctica. Tras esta intervención se reduce el riesgo de padecer cáncer a futuro solamente.
"La cirugía del cáncer de mama era la clásica mastectomía. Pero hoy se realiza también la cirugía oncológica o también llamada cirugía conservadora, donde se reseca al tumor y lo elimina sin llegar a la mastectomía. Luego de ello, aprendimos que tras la cirugía oncológica era importante continuar con la cirugía plástica. Las nuevas cirugías de reconstrucción mamaria han evolucionado y permiten hoy a la mujer tener más calidad de vida", afirmó Rocco.
Y también destacó que son importantes los tratamientos neoadyuvantes, que son tratamientos adicionales contra el cáncer que se administran después del tratamiento primario para disminuir el riesgo de que vuelva. La terapia neoadyuvante puede incluir quimioterapia, radioterapia, terapia con hormonas, terapia dirigida o terapia biológica. Gracias a ellos podemos evitar mastectomías hoy.
"Sobre quién es el más capacitado para realizar una cirugía oncoplástica, lo mejor es el mismo cirujano que haga todo el trabajo, el de la remoción de la mama y su reconstrucción. Si no es el mismo, hay que buscar al mejor cirujano plástico entrenado para hacerlo", puntualizó Rocco.
La reconstrucción se realiza de manera híbrida (grasa más implante) y autóloga, con tejido propio tomado de otra parte del cuerpo. "Hay varios factores se toman en cuenta a la hora de una reconstrucción mamaria.
Muchas mujeres no poseen suficiente grasa propia para hacerla. Lo mismo sucede con muchas que no tienen suficiente tejido para extraer de otra parte del cuerpo", finalizó el especialista.
Fuente: Infobae - Acceda aquí para leer el artículo original.